Un político nunca quiere perder la oportunidad de hacer alarde de su trayectoria y recordar a los votantes del buen trabajo que hacen. Al seguir el patrón, el Presidente Biden visitó Pueblo – el primer presidente americano en 60 años – para hacer justo eso. Visitó a CS Wind, la fábrica de turbinas más grande en el mundo, para hablar del empleo.
“El empleo,” dijo el Presidente, “de eso se trata esa cumbre, no sólo el salvar vidas y el medioambiente.” CS Wind, una fábrica justo al sur de Center City, está al frente. CS Wind ha tomado raíces en Pueblo con una expansión de $200 millones y ha duplicado su fuerza laboral a 800 trabajos y hasta 500 más planeados para el futuro.
“Fue emocionante para toda la comunidad,” dijo el alcalde de Pueblo Nich Gradisar. No solamente era la primera visita por un Presidente desde que John F. Kennedy visitó en al verano de 1963, dijo, sino que vino a demostrar los beneficios del Acta para Reducir la Inflación (IRA por sus siglas en inglés) que aparta docenas de billones de dólares para los incentivos de energía verde.
Aparte del IRA, el Presidente también firmó la Infrastructure Investment and Jobs Act el año pasado y Pueblo, dijo Gradisar, recibió $16.8 millones por medio de la legislación bipartidaria. Una gran porción de ese dinero está apartado para obras en el oeste de la ciudad, una parte de la ciudad donde falta mejorar todo desde las banquetas a los puentes y facilitar para los residentes una conexión al resto de la ciudad. “También vamos a expandir el sistema de alcantarillado sanitario.” Cree Gradisar que esos mejoramientos le darán un enfoque nuevo y positivo al área.
Gradisar cree que al medida que el lado oeste de Pueblo reciba estos mejoramientos planeados y CS Wind aumente su fuerza laboral, puede llegar a ser el lugar donde los nuevos empleados y otros deciden vivir. “La vivienda,” dijo el alcalde, “es una de nuestras prioridades principales.” Se ha hablado ya de construir hasta 600 unidades de viviendas para bajos recursos económicos en la comunidad, dijo. Gradisar quiere una combinación de viviendas para los residentes de ingresos fijos como también para los jóvenes que quieren quedarse a vivir en Pueblo.
Con una fuerza laboral joven arribando con la expan- sión de CS Wind y el crecimiento continuo de la ciudad, Gradisar espera que los constructores lleguen a ver Pueblo como una buena oportunidad para empresas nuevas. El quiere ver “nuevos edificios donde la gente quiera vivir… la gente vieja que esté cansada de trabajar en el patio y quieran un lugar más bello.” La ciudad, dijo el alcalde, no tiene suficiente opciones.
El miembros del consejo municipal de Pueblo Dennis Flores dice que una de las prioridades en cuanto a la infraestructura es el puente de Union Avenue que conecta la histórica avenida con una parta de la ciudad conocida como el Mesa Junction. El puente ha recibido muchos mejoramientos cosméticos, dijo Flores, incluyendo ban- quetas nuevas y pavimento nuevo, pero su momento ha transcurrido. “Hay que reemplazarlo.”
Flores, quien ha servido en tanto el consejo escolar como en el consejo municipal de Pueblo, dice que la expansión de CS Wind ya ha puesto a Pueblo en el mapa. Ahora el gran desafío es asegurar que pueda proporcionar vivi- endas para los nuevos empleados y sus familias. “Uno de los problemas más grandes es atraer a una empresa como ésta y preguntarse ‘¿dónde van a vivir los empleados?” Ahora, dijo, la ciudad va a necesitar cuando menos 10,000 unidades nuevas en los próximos 10 años.
El Presidente no salió de Pueblo sin burlarse de la congresista Lauren Boebert quien representa la ciudad en la Cámara de Representantes y votó en contra de la IRA. “Dijo que era un fracaso masivo,” dijo. “Dile eso a los 850 coloradenses que han obtenido un trabajo en Pueblo con CS Wind.” Al mencionar el nombre de Boebert, simultáneamente hizo el signo del crucífero. Es uno de sus chistes frecuentes cuando menciona a los republicanos que votaron acabar con la legislación pero destacan sus beneficios cuando hacen campaña en casa.
